INTELIGENCIA EMOCIONAL PARA ESCRITORES DE RELATOS
La inteligencia emocional es una herramienta poderosa para los escritores, a través de las emociones el escritor puede conectar con los sentimientos del lector y hacer que se identifique de una forma más íntima con los personajes, que comportamiento de los personajes sea auténtico y responda a un estudio psicológico más profundo. A continuación, te comparto algunas claves para aplicar la inteligencia emocional en la escritura de relatos:
-Comprender tus propias emociones es comprender la de los personajes. Usa tus propios sentimientos y vivencias como base para entender cómo se sienten las personas en tu relato, en situaciones similares, podemos ponernos en el lugar de ellos. Expresar con honestidad aquello que sentimos de una forma cercana y verdadera desde su voz para que sea muchos más creíble.
-Construir personajes emocionalmente complejos con claroscuros y matices que hagan más rica su personalidad. Puedes dar a los personajes una vida real, con una mezcla de virtudes, defectos y deseos. Tienen que parecer humanos con contradicciones, imperfectos, con dudas y miedos. No siempre es necesario que hablen, puedes describir sus gestos, silencios, miradas o movimientos que representan el estado de ánimo.
-Generar empatía en los lectores, las emociones son universales, reconocibles, es un lenguaje que todos conocemos. A través de las emociones podemos entender situaciones, las experiencias que puede haber vivido un personaje, podemos contar historias a través de risas, lágrimas, gritos, sustos, sorpresas, ansiedad, desasosiego, todo aquello que inquiete al lector y aumente su curiosidad. Hacer que quiera saber más sobre la escena o la vida que está empezando a visualizar. El lector verá lo que nosotros pintemos con palabras en el lienzo que es nuestro papel.
-Revolucionar la emoción como motor de la trama, que emocionante¡¡¡. A medida que avanza la trama, las emociones de los personajes pueden evolucionar, revelando su desarrollo personal, las personas evolucionan en función de los hechos, van modelando su comportamiento. No se comportan de la misma manera con unas personas que con otras, los espejos también funcionan en nuestro relato. La química que puede haber entre dos personajes, el rechazo, la tensión, la pasión, el dolor, el autor construye mundos entre los distintos individuos. Podemos sentir si los personajes se aman o se odian por sus actos y palabras. Podemos sentir los latidos o el dolor, la alegría o la tristeza cuando los encontramos, las emociones son el resultado de sus interacciones.
-Dominar el tono emocional, variedad de ritmos e intensidades. Una escena de tensión puede tener frases cortas y directas, mientras que una de introspección puede tener oraciones largas y elaboradas.
Crea contrastes emocionales: Alternar entre momentos de tensión y alivio emocional mantiene el interés del lector.
-Recurrir a los sentidos. Describe las emociones a través de sensaciones físicas: Puedes decir…"estaba ansioso, su corazón latía a mil por hora, cuando apareció Cristina en la habitación, sus manos empezaron a sudar, le costaba respirar, emitía un sonido diferente al respirar"
Usa el entorno como reflejo emocional, el clima, el espacio físico o los objetos……………………… "la habitación tenía una luz rojiza de atardecer, por la ventana entraban los últimos rayos de la tarde, eran las ocho y media, el sonido del reloj de repente parecía amplificado, el sofá blanco era de color naranja y las paredes desprendían un calor extraño, se dibujaban reflejos de algún fuego invisible, nunca olvidó esa hora, miró el reloj y eran las ocho y media"
-Descansar, alejarse del documento y retomarlo de nuevo al día siguiente, evitar la saturación. Evitar el perfeccionismo extremo, nunca existe el escrito o el relato perfecto, siempre se puede mejorar o perfeccionar. Retocar continuamente el texto resta la frescura del momento creativo en el que ha sido escrito, la espontaneidad se pierde. La naturalidad hace mucho más fluido un relato.
La inteligencia emocional no solo enriquece los relatos, sino que también te ayuda a crecer como escritor y como persona a través de los personajes.
La inteligencia emocional es una herramienta poderosa para los escritores, a través de las emociones el escritor puede conectar con los sentimientos del lector y hacer que se identifique de una forma más íntima con los personajes, que comportamiento de los personajes sea auténtico y responda a un estudio psicológico más profundo. A continuación, te comparto algunas claves para aplicar la inteligencia emocional en la escritura de relatos:
-Comprender tus propias emociones es comprender la de los personajes. Usa tus propios sentimientos y vivencias como base para entender cómo se sienten las personas en tu relato, en situaciones similares, podemos ponernos en el lugar de ellos. Expresar con honestidad aquello que sentimos de una forma cercana y verdadera desde su voz para que sea muchos más creíble.
-Construir personajes emocionalmente complejos con claroscuros y matices que hagan más rica su personalidad. Puedes dar a los personajes una vida real, con una mezcla de virtudes, defectos y deseos. Tienen que parecer humanos con contradicciones, imperfectos, con dudas y miedos. No siempre es necesario que hablen, puedes describir sus gestos, silencios, miradas o movimientos que representan el estado de ánimo.
-Generar empatía en los lectores, las emociones son universales, reconocibles, es un lenguaje que todos conocemos. A través de las emociones podemos entender situaciones, las experiencias que puede haber vivido un personaje, podemos contar historias a través de risas, lágrimas, gritos, sustos, sorpresas, ansiedad, desasosiego, todo aquello que inquiete al lector y aumente su curiosidad. Hacer que quiera saber más sobre la escena o la vida que está empezando a visualizar. El lector verá lo que nosotros pintemos con palabras en el lienzo que es nuestro papel.
-Revolucionar la emoción como motor de la trama, que emocionante¡¡¡. A medida que avanza la trama, las emociones de los personajes pueden evolucionar, revelando su desarrollo personal, las personas evolucionan en función de los hechos, van modelando su comportamiento. No se comportan de la misma manera con unas personas que con otras, los espejos también funcionan en nuestro relato. La química que puede haber entre dos personajes, el rechazo, la tensión, la pasión, el dolor, el autor construye mundos entre los distintos individuos. Podemos sentir si los personajes se aman o se odian por sus actos y palabras. Podemos sentir los latidos o el dolor, la alegría o la tristeza cuando los encontramos, las emociones son el resultado de sus interacciones.
-Dominar el tono emocional, variedad de ritmos e intensidades. Una escena de tensión puede tener frases cortas y directas, mientras que una de introspección puede tener oraciones largas y elaboradas.
Crea contrastes emocionales: Alternar entre momentos de tensión y alivio emocional mantiene el interés del lector.
-Recurrir a los sentidos. Describe las emociones a través de sensaciones físicas: Puedes decir…"estaba ansioso, su corazón latía a mil por hora, cuando apareció Cristina en la habitación, sus manos empezaron a sudar, le costaba respirar, emitía un sonido diferente al respirar"
Usa el entorno como reflejo emocional, el clima, el espacio físico o los objetos……………………… "la habitación tenía una luz rojiza de atardecer, por la ventana entraban los últimos rayos de la tarde, eran las ocho y media, el sonido del reloj de repente parecía amplificado, el sofá blanco era de color naranja y las paredes desprendían un calor extraño, se dibujaban reflejos de algún fuego invisible, nunca olvidó esa hora, miró el reloj y eran las ocho y media"
-Descansar, alejarse del documento y retomarlo de nuevo al día siguiente, evitar la saturación. Evitar el perfeccionismo extremo, nunca existe el escrito o el relato perfecto, siempre se puede mejorar o perfeccionar. Retocar continuamente el texto resta la frescura del momento creativo en el que ha sido escrito, la espontaneidad se pierde. La naturalidad hace mucho más fluido un relato.
La inteligencia emocional no solo enriquece los relatos, sino que también te ayuda a crecer como escritor y como persona a través de los personajes.
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