Soy casada, tengo dos hijos, cuatro nietos, mi última actividad fue como empresaria en un restaurant cultural en la ciudad de Montevideo, donde se desarrollaba cocina autóctona de mi país, con recitales de intérpretes de música, canto, poesía y teatro, con exposiciones de pintores y artesanos regionales.
En la navidad de 1996 participé de una Misa en comunión con portadores de sida (adónde acudía como voluntaria social), allí el sacerdote nos pide a todos que sintiéramos en nuestro corazón a ¿qué cosa nueva queríamos nacer en el proximo año? que lo escribiéramos en un papel y lo colocaramos en una canasta. Sin saber porqué, puse que a la escritura y a la poesía, por la belleza, por lo puro, por siempre admirar a quién escribía. El sacerdote, dijo, voy a sacar algunos, no todos porque son muchos, eso no quiere decir que no lo realicen, y mi deseo, fue el primero que leyó. Con el nuevo año me anoté en el taller literario de Jorge Arbeleche y Silvia Lago, ambos profesores de literatura (él, poeta uruguayo de renombre internacional y miembro de la Academia Nacional de Letras, ella, escritora y directora de la cátedra de literatura sudamericana de la facultad de humanidades y ciencias de la Universidad, escribe para editorial Planeta. Seguí asistiendo al taller hasta el 2004 en que me radiqué en esta ciudad (Paysandú), y aquí voy al taller de escritura de la profesora de literatura Liliam Silvera. Estoy muy contenta con esta actividad, Hoy leí en el diario El País de Uruguay un reportaje a Carmen Posadas que me encanta como escritora, leí de ella, "Juego de niños" y "A la sombra de Lilith", busqué la página y aquí estoy, muy movilizada emocionalmente por haber encontrado esta página y estar escribiendo mi perfil.
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Soy casada, tengo dos hijos, cuatro nietos, mi última actividad fue como empresaria en un restaurant cultural en la ciudad de Montevideo, donde se desarrollaba cocina autóctona de mi país, con recitales de intérpretes de música, canto, poesía y teatro, con exposiciones de pintores y artesanos regionales.
En la navidad de 1996 participé de una Misa en comunión con portadores de sida (adónde acudía como voluntaria social), allí el sacerdote nos pide a todos que sintiéramos en nuestro corazón a ¿qué cosa nueva queríamos nacer en el proximo año? que lo escribiéramos en un papel y lo colocaramos en una canasta. Sin saber porqué, puse que a la escritura y a la poesía, por la belleza, por lo puro, por siempre admirar a quién escribía. El sacerdote, dijo, voy a sacar algunos, no todos porque son muchos, eso no quiere decir que no lo realicen, y mi deseo, fue el primero que leyó. Con el nuevo año me anoté en el taller literario de Jorge Arbeleche y Silvia Lago, ambos profesores de literatura (él, poeta uruguayo de renombre internacional y miembro de la Academia Nacional de Letras, ella, escritora y directora de la cátedra de literatura sudamericana de la facultad de humanidades y ciencias de la Universidad, escribe para editorial Planeta. Seguí asistiendo al taller hasta el 2004 en que me radiqué en esta ciudad (Paysandú), y aquí voy al taller de escritura de la profesora de literatura Liliam Silvera. Estoy muy contenta con esta actividad, Hoy leí en el diario El País de Uruguay un reportaje a Carmen Posadas que me encanta como escritora, leí de ella, "Juego de niños" y "A la sombra de Lilith", busqué la página y aquí estoy, muy movilizada emocionalmente por haber encontrado esta página y estar escribiendo mi perfil.